Los consumidores podemos hacer mucho desde nuestro propio
hogar, a través de nuestros hábitos de vida.
Podemos y debemos ejercer nuestra responsabilidad individual a la hora de cuidar y mejorar nuestro entorno.
Con gestos sencillos, como ahorrar electricidad, calefacción, agua o combustible, se puede conseguir que mejore la calidad de vida de la comunidad.
Podemos y debemos ejercer nuestra responsabilidad individual a la hora de cuidar y mejorar nuestro entorno.
Con gestos sencillos, como ahorrar electricidad, calefacción, agua o combustible, se puede conseguir que mejore la calidad de vida de la comunidad.